Estos cromos se encontraban en las tabletas de chocolate de La Herminia, Plim y Sueve fabricadas por Industrias Herminia de Gijón, que se fundó en el año 1885 por la familia de Herminio Fernández, que fue alcalde de Gijón. Estaba situada en un bajo comercial. Al principio sólo fabricaban chocolate a la taza y su elaboración era manual. En 1960 un industrial gijonés compra los derechos de marca y fabricación del chocolate y empieza a elaborar otros tipos de chocolate, entonces nace la marca Plim. El volumen de fabricación es muy grande y decide trasladar la fábrica a Porcello, donde cierra en el 2004.

Martin es un muchacho que vive con su padre alcoholico, el cual trabaja en el mundo del tren. Este le enseñara toda acerca de su trabajo, pero cuando muere en extrañas circunstancias en un accidente de tráfico, Martin recibirá la visita de un misterioso tren a manos de un extraño conductor. ¿Aceptará el pacto que le ofrece y sus consecuencias?. Adaptación del relato corto de Robert Bloch's ganador del premio Hugo de 1959.